martes, 28 de abril de 2009

APRENDIENDO A NO CALLAR...

Algo que tengo como "tarea" es aprender a decir las cosas que no me gustan, mejor dicho, que cuando algo me moleste (causado por otra persona) no quedarme callada.

Suelo quitar mucho hierro a las cosas que me molestan, sean dichas o hechas por otras personas. No es que me dén un bofetón y ponga la otra mejilla.... pero casi. Aunque mis padres, cuando era pequeña, intentaron enseñarme a defenderme. Ojo por ojo (si me tiran de los cabellos, igual debería engancharme a los cabellos de la otra -visión de infancia: tendría cuatro años cuando una niña sin venir a cuento me dió una cachetada (bofetada) y me quede con cara de "¿qué hice?", se lo conté a mis padres y creo que me dijeron que si volvía a pasar que le hiciera lo mismo... nunca volvió a pasar, así que no pude hacerle lo mismo-).

A lo largo de estos años me he ganado la fama de ser "muy buena". Hubo un tiempo en el que me agobiaba que me dijeran eso (casualmente la frase se repetía incansablemente en un corto periodo de tiempo). Me sentía un poco tonta, porque igual en vez de decir "buena" querían decir "tonta". La buena de Olivia nunca se enfada. La buena de Olivia aguanta carros y carretas. La buena de Olivia es una santa. Acabaramos! Que no soy tan buena, ni soy una santa! solo que no me gusta entrar en conflicto, soy razonable, sensata... o procuro serlo. Mi carácter es así, mas bien reposado (que no aletargado). Aunque cierto es que las cosas tienen un límite (alguna vez he hablado de ello). Y cierto, el costalillo de Olivia a veces no puede contodo y se llena. Y cuando lo vacía... es como vomitar todo y ahí sí aparece una Olivia que otros no conocen, de pronto ese genio aparece y tal cual lo hace se va. Y eso tampoco esta bien.

Con lo sucedido (contado en el post anterior) he aprendido algo. A hablar y decir aquello que no me gusta y que me molesta, sin gritar, sin enfadarme.

Olivia salió de su habitación, dejó de llorar y habló con su amiga. Le dijo lo que realmente pensaba sin callarse nada. Le dijo porqué no salió de su habitación, le dijo porque no quería verla, le dijo lo que sintió... le dijo que por querer dejarla tranquila ella se quedó jodida. Le dijo que todo volvería a la normalidad siempre que ella (su amiga) no volviera a sentir semejante estupidez, y si se ha quedado tranquila porque Olivia no tiene ningun interés por novio ajeno, le ha dejado claro que eso mismo es lo que le ha jodido a Olivia... la duda, o falta de confianza (de su amiga y nada mas que de ella). Y por supuesto, que esas cosas antes se hablan con el interesado (su novio) no con ella (a menos que vea que Olivia se lanza al cuello del su novio o algo así, ja!).

P.D: Tesa.... no puedo entrar en tu blog... !

4 comentarios:

Calvarian dijo...

Querida Olivia...conmigo estás en desventaja...Si yo te doy un guantazo, bofetada, o mamporro, puedes devolvérmelo...pero si te tiro de los pelos vete buscando forma de respuesta jajaja
Besix

Olivia dijo...

Calvarian: Jajajaja.... me has pillao, jajaja.

Ramón de Mielina dijo...

Un hurra por Olivia!!!!!!!

Lala dijo...

Hay un dicho por ahí que dice:
"se tardan 2 años en aprender a hablar pero toda una vida en aprender a callar"
Eso de serenarse cuando las cosas nos sacan de quicio es realmente difícil.
Y la única salida en este caso es hablar clarito, como has hecho tú, tenga las consecuencias que tenga!
Al menos no nos quedamos con el muerto dentro...



Un besito


Lala