LOS RUIDOS...

Olivia se siente como una olla a presión... cuando tenga un poco mas colocados los pensamientos, lo diré algún día. Pero algo tiene que ver una propuesta no contestada (Olivia propone, X no contesta), y un e-mail no respondido (X escribe a Olivia, y Olivia no le responde) ... porque no recibe ningún e-mail, por lo menos con nada importante que al parecer a X sí le parecía digno de contestación (no creo que un correo en cadena sea el propósito de X - me enervo- , pero ya me enteraré).

Dicho lo cual, os cuento algo acaecido en mi querido hogar. Anoche, tuve el placer de ver a mis invitados. Una amiga (mujer de un viejo amigo) que ha venido a pasar unos días a mi ciudad por motivos profesionales, junto con un amigo suyo (vamos, que estan homologando sus respectivos títulos). Bueno, como mi humilde morada solo dispone de dos habitaciones le dije a Gali:

- Gali, nena... ¿¿puedo dormir contigo estos días??
- Vente pa'ca morena - y su novio, pues que la eche de menos unos días, que ya tendrán noches locas para disfrutar.

Y es que he cedido mi habitación a mi amiga (ahora amiga de Gali) y el sofá al amigo de mi amiga (ahora amigo mío, y de Gali).

Resulta que anoche para hacer las debidas presentaciones, hice una cena en casa (un par de pizzas, un salmorejo, y ensalada), y charla que va, charla que viene y no sé a cuento de qué empezamos a hablar de los "ruidos" de la casa... no, no, no me seais mal pensados, que ya se por donde vais.

Y es que a Fulvio (así se llama el amigo de mi amiga, ahora amigo nuestro...un italianini, mas concretamente de Nápoles..., algo así como el barrio chungo, ¿os suena la Camorra? pues eso...no, no...el no tiene na que ver con esa peña -le creemos-) con eso de que dormirá en el salón le acojonamos un poco, juas, juas, juas.

Curiosamente en ese lugar, las pesadillas se suceden. Bien por una ingesta tremenda, o por tener una jungla en el salón (como se reproducen los cólios chicos, una planta que no parece ná y anda que se manifiesta y bien, pide agua cuando le toca, se pone hermosa cuando esta alimentada...un ser viviente como dios manda!).

Alguna vez La Oráculo, que se ha quedado a dormir unas cuantas de veces, me preguntado:

- Oli, has pasado por el salón anoche?
- Ein?
- Sí, es que he sentido clarito pasos al lado mío... me ha dado acojone abrir estos ojazos.
- Habrán sido los vecinos bulleros de arriba mujer - Ups!

Y cuando yo he dormido, siempre he tenido pesadilla... lo típico, que te crees que estas despierto y no te puedes mover. Que alguien tira de tus pies, o se te acerca alguien y te despiertas...vamos, esas cosas. Luego no había nada, claro está.

Lo que experimentó Gali hace unos días fue quedarse frita en el sofá y según ella, verme pasar (joer! y yo no estaba en casa) y ver a alguien más que le veía desde detrás de una de las columnas del salón. Gulp! ¿Sería el atiborre de comida que se habría zampado esa tarde, y su pedazo de siesta se convirtió en pedazo de pesadilla? Vamos, que yo aparezca en su sueño (que parecía muy-re-al, según palabras de Gali), puede ser...pero un hombre mirandola desde una de las columnas y que se acercaba a ella!...ya me acojonaría.

Sí señores, con estas historias (jejeje) se quedó Fulvio a dormir en el salón. Ná, un machote como el que más (italianini, recordemos) y un sueño de caballo. Así que dudo que le haya dado tiempo a escuchar nada, ni ver nada, ni nada de nada, jajaja.

17/06/09

Un día después de este post, Fulvio me ha dicho que sintió algo... alguien que pasaba al lado suyo pero no quiso abrir los ojos...buuuuuhhhh...