Como una barquita que no encuentra su puerto... con el corazón hecho añicos... como la noria que sube y baja. Y el vértigo que da. Porque yo no aguanto ni un tiovivo.
Detesto seguir con esta mirada triste. Que no miente. La sonrisa que pinta mi cara no engaña a mucha gente.
Hoy he roto un lazo con una realidad virtual. El cordón umbilical a una realidad sesgada, privada, mutilada. Solo para estar bien yo y nadie mas que yo. ¿Hasta cuando? no sé...nunca me negué a nada. En realidad hasta que deje de leer "no se que decirte", "no se como dirigirme a tí"... o frases por el estilo, eso no me dice nada y me dice mucho aunque luego intente adornar las cosas, con probablemente sincera preocupación. Hoy me niego a seguir sufriendo por nada. Valgo mas que eso.
Y duele...joder...cómo duele.
"Por fin le he dicho... no me escibas, no lo hagas por favor..."
7 comentarios:
Bien hecho... ojalá yo fuese igual de valiente...
Olé tus ovarios, así se hace, hay que cortar con las cosas que nos arrastrar por un mal camino.
Besitos
Ánimo!! :D
Bien por ti ;-)
...tiritas pa este corazón partío
crulfunc, es la palabra a verificar
¿tú te crees? parece lenguaje Gnomo
:)
Jajaja..pues sí Tesa.
SAbes, lo más difícil es decidirse a decir "ya basta". Una vez que lo has dicho, no hay remedio.
Pero ese es un gran paso, del que pueda que te arrepientas o no, pero gan paso es. Creo que estoy orgullosa de ti.
Yo también he muerto...
Algo había que hacer, no?
Un abrazo, Olivia
P
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