LOS PECES DE COLORES....

- ¿Qué piensas hacer Oli?- le preguntó su hada, mientras cotilleaba el rinconcito donde tiene los perfúmenes.

- Chica, pues me ha pillado desprevenida... la semana pasada ha sido rara, y ahora que ya estoy mas animada, pues la verdad, no me esperaba que "apareciera". - lo decía mirando a la nada y como rebuscando en sus pensamientos.
- Verás, cuando ese chico se dirigió a tí por última vez no estaba en su mejor momento, ¿no? ese pez de color que no tenía las cosas claras, entonces, ¿a cuento de qué aparece ahora?
- Pues, la verdad no lo sé, será que le apetecía contestar a aquél email que le envié...pero hace ya. Sinceramente, después de eso no tenía la mínima intención de dirigirme a él, y de echo, no lo hice. Ya sabes, hay momentos en los que si no hay respuesta lo mejor es dejarlo estar. Que corra el aire, que el agua fluya, que las cosas no se queden estancadas, y él a pesar de todo sé que quiso hacer las cosas bien. Eso me gustó, y fue noble por su parte aunque luego nos dejaramos llevar por la pasión (ay! la pasión....), y ya está, un bonito recuerdo y se quedó ahí. Y esa buena intención de la "amistad"... si uno no pone de su parte... pero yo tampoco le veía como un amigo del todo, ¿entiendes?. Fue mejor así, este tiempo de alejamiento. - se quedó en silencio.
- ¿Y te apece aceptar su invitación a quedar?
- Sí. - no dudó en la respuesta.
- ¿Y tu nuevo amigo? - se acercó el hada, aleteando fuertemente al lado de sus oídos.
- No tienen nada que ver una cosa con la otra. A uno empiezo a conocer, a otro ya le conozco... o le conocí algo, mas bien.
- ¿Pero no confundas las cosas, eh?... si estas bien ahora, simplemente "conociendo" a aquellos que te apetece conocer...
- Verás, siempre hay una milésima de segundo en el que piensas más de la cuenta, se te va la olla, y sí, admito que si me preguntas...¿te gusta uno? te diría que sí, y si me preguntas ¿te gusta el otro? te diría que sí, "pero"... y ese "pero" lo cambia todo. Y no, no jugaría con los sentimientos de nadie, bien lo sabes. No me mires así, que no hay nada con nadie. Aún no tengo a nadie "especial", aún no.
- Vale, mientras tengas claro eso... mantente en el margen, ya sabes, siempre hay tiempo para saber por donde van las cosas, por donde quieres ir tú, y por donde van los demás. Y al final, sea cual sea el camino a seguir, lo eliges tú. Aunque te equivoques...
- Lo sé, hada, lo sé.