PRESENTACIONES....

Hace unos días conocí a los padres de mi chico.

Siempre había pensado que sí la persona con la que sales te presenta a sus padres es que va en serio contigo, es que te quiere... bueno, digamos que en parte es así, pero creo que también depende de la madurez que tengas el como te tomes estas cosas.

Recuerdo que con mi primer noviete, conocí a su madre en cero coma. No hubo comida formal, eramos unos críos (bueno, con veintipocos no eres crío, pero eramos novatillos), ni presentaciones formales, simplemente un día me llevó a su casa y la madre estaba allí. Muy maja eso sí. Con mi segundo noviete, fue igual de rápido. Un día me invitaron a comer, y conocí a su madre y al marido actual, y por otro lado conocí al padre (estaban divorciados)...recuerdo que éste me regaló un anillo de coco, no sé por qué pero me lo dió el primer día que me conoció (ni su hijo me dió un regalo). De estas dos experiencias, recuerdo que me gustó conocer a las familias, pero también recuerdo que cuando se terminaron las cosas (en la segunda a muy poquito tiempo) sinceramente, pensé que tal vez no había por qué conocer a los padres tan pronto. ¿Por qué? ¿qué mas da conocerlos antes que después? sí, supongo que si te apetece compartir eso con quien estás da igual si las cosas salen bien o mal o no salen. Pero, no sé... tal vez es como esperar a que las cosas "cuajen" pasado un tiempo, es como cuando cae la fruta madura, no puedes hacer nada para impedirlo. Y así es, cuando mi pez conoció a mis padres fue después de casi cinco meses juntos. Y él se puso nervioso, incluso prefería una comida formal a una presentación de "como quien no quiere la cosa", que en su momento era lo que yo pretendía.

Así que ahora que he conocido a sus padres, casi nueve meses después de que empezaramos, creo que las cosas han sido en el momento que tenían que ser... fui la sorpresa, ja! una comida en su pecera, y como las madres se las huelen todas, ella ya imaginaba que yo estaría.

Supongo que mis nervios fueron los normales, de echo, también he asimilado el hecho de que ha sido un paso mas para los dos... para mí, que parece que me cuesta un poco esto de ir atando-me, jajaja. Mi mundo interior es muy temeroso y muy amplio, pero... me sale del fondo decir que"le quiero". Y sé que él lo tiene muy claro, y me alegra saber que le gustan mis rarezas, esas que a mi me asustan y no me gustan a veces, pero... que es parte de mí.

Y sí, la primera impresión ha sido buena, :-).