martes, 26 de octubre de 2010

Momentos...

El otro día fui a visitar a "mi sobrino". En realidad es el hijo de unos amigos míos, y como mis hermanos aún son jovencitos para hacerme tía (bueno, poder podrían, pero dudo que quisieran cuando aun no han cumplido los treinta -ni los veinticinco-, ni tienen con quien -entiendase pareja estable... mmm...-), nada mejor como los amigos para sentirlos como familia y no solo amigos. Como familia no directa, pero lo suficientemente cercana para que sus hijos quien sabe me llamen "la tía Oli".

Y estando con el pequeño entre mis brazos, me pareció maravilloso sentir su cabecita pegada a mi cara. Cuando le daba besitos, el niño se pegaba como queriendo más, jeje. Tiene unos seis meses, la mirada vivaz, una sonrisa picarona, unos ojos preciosos, y se movía como queriendo salir de marcha... ains... qué cosita! Y mientras le sentaba sobre mis piernas, para darselo a su madre y le llevara para darle su baño, de pronto sentí en mis manos y en mi pierna una oleada de calor.... "me ha vomitado!!...".

Qué adorable son los bebés. Aún tengo margen para empezar a plantearme lo del reloj biológico. Prefiero no pensarlo aún, si bien en algún momento me gustaría tener el cartelito de "bebé a bordo" (ups! pero primero tendría que comprarme el coche, jejeje). Y es que son tantos pasos que uno quiere dar antes de plantearse eso...

Mientras, disfruto de la compañía de mi pez... siempre con algo nuevo que descubrir juntos, esas manías, esas confianzas que nos vamos tomando, esa complicidad que se va formando. Hace unos días le dejé en su casa un pijama, una mantita, unas zapatillas de andar por casa, y una rebeca para esas tardes que pasemos en el sofá... "querido, esto es un pasito más en nuestra relación", yo diciendo estas frases y me quedo mas ancha que larga, ja! el me mira, y me dice "deja lo que quieras... pero, ¿dónde lo piensas poner?" y se ríe. Ains... si en el fondo creo que le gusta, jeje.

6 comentarios:

Winnie dijo...

Bueno Oli....se te ve encantada con tu pececito y hasta pensando en babys....jaja. Me alegra un montón leerte así.
La vida son Momentos...sí señorita. Un besote

Unknown dijo...

Olivia, me ha encantado esta entrada... desprende ternura (por lo del bebé) y felicidad (por lo de tu pez)... Espero que siempre sea así y que podamos seguir leyendo momentos tan preciosos como estos en tu blog.
Un besote.

Calvarian dijo...

Pero que mandona eres jajaja
Cuidado con los niños Oli...luego crecen y te puede salir un calvo feo como yo. Te arrepentirías de tener un soltero en casa para siempre jajajaja
Bésix

anapedraza dijo...

Uy, eso yo ya lo he vivido, si yo fuera tu pececito, me ponía los condones de dos en dos, ¡JAAAJAAAAAAA!

Nada, si quieres niños te mando yo a Claudia un ratito, un encanto de niña de 19 meses, pelirroja que allá donde vaya llama la atención, con ojos grandes, que no para quieta y da por saco a todas horas, que te quita el sueño a diario, JAAJAAAAA, menos mal que inventaron el Bob Esponja, es lo único que la mantiene tranquila.

Nada, nada, los hijos, mejor de otras, hazme caso.

¡Un beso!

Miguel

Tesa dijo...

Qué monos son. Despiertan el instinto maternal. A mí me pasa con una sobrinita que nació en febrero.
Y es que mi ganso va a cumplir 17 añazos y ya no hay quien le achuche.

HADALUNA dijo...

Qué graciosa eres y con que gracia cuentas las cosas...

Besitos mágicos.